En algunas ocasiones, hay personas jurídicas que ejercen actividades con ánimo de lucro sin cumplir con los requisitos y condiciones para estar dadas de alta como sociedad anónima o limitada. A esto se le llama sociedad irregular, cuando una sociedad anónima o limitada no sigue la normativa establecida por la Ley de Sociedades de Capital ni las exigencias del Registro Mercantil para que pueda desarrollar su actividad de forma legal y transparente.
Qué es una sociedad irregular
La sociedad civil irregular es aquella que, en un principio, iba a adquirir la condición de limitada o anónima, acogiéndose a las condiciones y requisitos establecidos por la normativa española, pero falla en alguno de los procedimientos y termina adquiriendo una situación legal diferente. La sociedad dejará de seguir la normativa de las anónimas y/o limitadas, careciendo de carácter mercantil y pasando a tener una responsabilidad totalmente diferente.
Tal y como se establece en el artículo 119 del Código de Comercio, existe la obligación de constituir cualquier sociedad en su correspondiente escritura pública e inscribirla en el Registro Mercantil, siempre que se cumplan los requisitos predeterminados. De no hacerlo, la empresa no podrá acogerse a las condiciones y características de cada tipo jurídico, y nos encontraremos frente a una sociedad irregular en España.
Qué consecuencias puede tener una sociedad irregular
Cuando una sociedad es irregular, se debe plantear si esta tiene o no personalidad jurídica. Esto es algo que depende de la voluntad de los socios, que deben especificar explícitamente si verifican o no su intención de inscribirla en el Registro Mercantil. En caso negativo, pasaría a ser una sociedad devenida irregular y se le aplicaría la normativa de la sociedad colectiva (o de la civil en caso de haber comenzado y/o continuado su actividad).
Los actos de una sociedad sin personalidad jurídica se considerarán nulos, y existen dos consecuencias principales si no se inscribe de manera pública a la sociedad en el Registro Mercantil:
- Con respecto a la responsabilidad de los socios, esta se complica bastante si la comparamos con la sociedad limitada o la anónima. Desde el momento en el que una sociedad operativa y con ánimo de lucro decide no inscribirse en el Registro Mercantil, la responsabilidad pasa a ser solidaria por parte de los administradores, que tendrán que responder con sus bienes personales frente a cualquier obligación de pago.
- Los pactos sociales se imposibilitan en una sociedad irregular, es decir, aquellos actos sujetos a inscripción que no sean escritos y no se publiquen en el BORME, no podrán ser oponibles a los terceros de buena fe.
Cualquier socio puede solicitar la disolución de la sociedad irregular ante el Juez de lo Mercantil correspondiente al domicilio social de la misma. Además, este socio exigirá que restituyan sus participaciones cuando el patrimonio de la sociedad esté totalmente liquidado.
Ahora que sabes qué es una sociedad irregular, no tendrás problemas para identificarla, conociendo sus peculiaridades y consecuencias. La sociedad irregular, de ser inscrita en el registro, pasará a acogerse al régimen de responsabilidades que le corresponda, pero los socios tendrán que seguir respondiendo por actos anteriores a la inscripción.
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